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              Los Angeles en la Vida Social Humana
                
                  
 
 CAPÍTULO X
 LA 
                  ACTIVIDAD DE LOS SEÑORES DEL KARMA EN LA VIDA DEL UNIVERSO
   
                  Las indescriptibles y exaltadas 
                  Entidades Psicológicas que esotéricamente llamamos LOGOS, ya 
                  se refieran a los que rigen una Galaxia, una Constelación, un 
                  Universo o un simple planeta, están sujetos también, aunque de 
                  manera inexplicable e incomprensible, a la Ley del Karma. El 
                  nacimiento, la muerte y el proceso inexorable de la 
                  reencarnación forman parte de aquella Ley, aunque utilicen 
                  para manifestarla unas zonas del espacio tan enormemente 
                  dilatadas que los efectos del tiempo están más allá y por 
                  encima de nuestros cálculos y medidas. 
 Sin embargo, y tal como esotéricamente sabemos, el espacio es 
                  una abstracción, siendo el tiempo un fenómeno que se realiza 
                  en el interior de la conciencia humana cuando trata de 
                  objetivizar el espacio a través de los movimientos de rotación 
                  y de traslación de nuestro planeta Tierra, unos movimientos 
                  que al parecer son comunes a todos los cuerpos celestes.. 
                  Precediendo a la manifestación cíclica de cualquier Universo o 
                  de cualquier planeta hay, aparentemente, una Determinación 
                  Cósmica que crea en el espacio las condiciones precisas 
                  mediante las cuales los Logos creadores podrán surgir 
                  objetivamente a la manifestación. Tal como analizamos en el 
                  volumen primero de este Tratado, tales condiciones vienen 
                  fijadas por aquel supremo sentido de elección del campo de las 
                  manifestaciones por parte de una Voluntad suprema, de la cual 
                  no se habla mucho en los estudios esotéricos, pero que es una 
                  expresión de la actividad misteriosa de los Señores del Karma. 
                  Estos ANGELES, supremos representantes de la Ley cósmica de 
                  armonía, tienen en conjunto coma símbolo la figura geométrica 
                  de la CRUZ, a la cual y casi sin distinción alguna han rendido 
                  adoración las religiones y filosofías del mundo desde el 
                  principio de los tiempos... La imagen de la CRUZ toma 
                  básicamente su importancia, y de manera incomprensible forma 
                  parte, de los misterios iniciáticos, porque los Señores del 
                  Karma preceden a la manifestación cíclica de cualquier 
                  Universo situándose, esotéricamente hablando, arriba y abajo y 
                  a derecha e izquierda de un punto en el espacio que bien 
                  podríamos calificar de ATENCION suprema del Logos, 
                  constituyendo las bases del Cuaternario Cósmico a través del 
                  cual la Vida del Logos creador, el Krishna universal, tendrá 
                  oportunidad de dar vida, conciencia y una forma objetiva a 
                  Arjuna, intérprete de las decisiones de Krishna y seguidor 
                  incansable del Destino que de acuerdo con experiencias 
                  precedentes del Logos, le señalarán sabiamente los Señores del 
                  Karma.
 
 Creemos sinceramente que los conceptos que acabamos de emitir 
                  contienen significados dignos de una profunda atención, pues 
                  de acuerdo con el sistema de investigación esotérica que va de 
                  lo universal a lo particular y aplicando convenientemente la 
                  analogía, la actividad de los Señores del Karma en la vida 
                  humana podría ser correctamente clarificada.
 
 Trazada la Cruz en los Cielos, tal como místicamente se dice, 
                  la Vida de Dios se infunde en la Materia y el Corazón Solar 
                  empieza a latir. Las mágicas contracciones y dilataciones de 
                  estos latidos, las sístoles y diástoles de este inmenso 
                  Corazón originan en tiempo y espacio los fenómenos 
                  característicos conocidos científicamente como ROTACION y 
                  TRASLACION. Tales son las analogías de estos universales 
                  movimientos:
 
 
 
                   
              
                
            
                    
                Tales analogías pueden ser íntegramente aplicadas al planeta y 
                al hombre, así como místicamente también a todos los centros de 
                vida menores que viven, se mueven y tienen el ser dentro del 
                dilatado círculo del Universo. 
 Volviendo a la función primordial de los Señores del Karma, 
                podríamos decir que las Aspas de la Cruz constituyen los límites 
                de expansión de la rueda del Universo, creando el misterioso 
                Círculo-no-se-pasa del mismo, es decir, sus fronteras naturales 
                dentro de las cuales el Logos solar deberá realizar su íntima y 
                particular evolución y salvaguardar los intereses espirituales 
                de Su Vida, el Tesoro infinito de Su Conciencia inmortal. El 
                movimiento de DIASTOLES en la infinita dilatación del Corazón 
                solar lleva las energías de la Vida a todo el contenido 
                universal; el movimiento de SISTOLES lleva las cualidades de la 
                forma al centro mágico del Corazón. En el entrejuego de las 
                energías de la Vida y de la Forma se halla el secreto de la 
                Electricidad, ese misterio al cual tantas veces nos hemos 
                referido durante el curso de este Tratado. El altruismo del 
                Espíritu y el egoísmo de la Materia manifestadas como energía 
                contienen el secreto inmenso de la Creación, ya sea de un 
                Universo o de un simple átomo. Es la ley de la Dualidad que rige 
                el principio de la Manifestación cíclica.
 
 Ahora bien, examinando científicamente los movimientos de 
                contracción y dilatación del Corazón solar, después de haber 
                reconocido esotéricamente la intercesión de los Señores del 
                Karma que depositaban o introducían la CRUZ mística de la 
                manifestación en los espacios absolutos creando el círculo 
                máximo de expansión de la Vida del Logos, nos será fácil 
                reconstruir el proceso creador del Universo, aceptando como 
                absolutamente válida la imagen astronómica de la Nebulosa, esta 
                inmensa espiral de energía cósmica en proceso de substanciación 
                o materialización, la cual surge del centro del corazón solar y 
                se lanza al Cosmos a la gran aventura de la conciencia, pero 
                retorna eternamente al centro de donde dimana llevando al mismo 
                Materia cada vez más densa pero, al propio tiempo, más 
                cualificada. Quizás llegaremos a reconocer un día la misteriosa 
                aunque íntima relación que existe entre el proceso de 
                substanciación material del Universo y la ley de Gravedad, que 
                es su natural consecuencia, con la actividad maravillosa y 
                secreta que llevan a cabo los Señores del Karma, los Angeles de 
                la Cruz cósmica.
 
 Esta CRUZ, en multiplicidad infinita de aspectos, matizará 
                entonces la magia dinámica de la Creación y todas las 
                manifestaciones de la vida espiritual o monádica en proceso de 
                experimentación y de evolución, desde el centro mismo de la 
                materia, cualificando cada una de sus vastísimas expresiones y 
                la imagen de esta CRUZ, penetrando profundamente en las 
                conciencias humanas, elevará sus aspiraciones al centro místico 
                de procedencia cósmica: el SOL CENTRAL ESPIRITUAL, creando las 
                religiones y las creencias espirituales a través de las cuales 
                han expresado sus ínfimos anhelos de contacto solar. 
                Consecuentemente al desarrollo de esta verdad esencial en la 
                línea de nuestros comentarios, nos pareció oportuno dedicar unos 
                capítulos al estudio de los efectos de las ceremonias mágicas y 
                litúrgicas de las religiones en la vida espiritual del hombre, 
                en el volumen segundo de este Tratado.
 
 Otra de las ideas que hay que considerar en relación con los 
                Señores del Karma es la que hace referencia a la imagen mística 
                de la CRUZ gravitando en forma de DESTINO sobre la vida de todos 
                los seres vivientes, pudiendo afirmarse desde el ángulo 
                esotérico y de acuerdo con el principio de analogía, que el 
                KARMA, como esencia de MUERTE, JUSTICIA, MEMORIA y LIBERACION 
                está presente en la manifestación de todo lo creado, dirigiendo 
                con sabiduría infinita la evolución del Universo, de los 
                planetas, de los planos de la Naturaleza, de las Razas humanas, 
                de los Reinos y de las especies. Hay, por tanto, un sentido de 
                dirección tan justo y equitativo en todas las cosas de la vida 
                que bien podríamos calificarle como de supremamente fraternal. 
                Este sentimiento íntimo de fraternidad actúa por doquier, en el 
                aire, en el fuego, en el agua, en la tierra, en el éter 
                primordial, cualificando la vida de los elementos naturales, los 
                cuales, de manera maravillosa, constituyen las palancas de 
                presión de los Señores del Karma en la vida de la Naturaleza 
                física, aunque actuando asimismo en todos los niveles de 
                evolución en el Universo y sobre todos los estados de conciencia 
                divina, manifestados bajo no importa qué tipo de forma objetiva 
                o subjetiva, en la extensión de todo lo creado.
 
 Los Señores del Karma son la Ley que preside y ordena la 
                ejecución de cualquier hecho y circunstancia en la vida de la 
                Naturaleza. Los Arcángeles supremos que rigen los planos del 
                Universo, los Angeles superiores que rigen la vida evolutiva de 
                los Reinos y los exaltados Devas que se hallan en la raíz 
                mística de la existencia de los hombres, son Agentes de los 
                Señores del Karma, los brazos ejecutores de la Ley, siendo su 
                labor tan supremamente impersonal y fraternal que examinada su 
                actividad desde el ángulo esotérico le demuestran al alma que la 
                paz, la plenitud, el orden y la justicia no son simples y 
                engañosas palabras, sino una REALIDAD profundamente objetiva que 
                puede ser revelada en cualquier momento de la vida si se 
                desarrolla un profundo sentido de atención hacia todo cuanto nos 
                rodea, sea la vida armónica de la Naturaleza con sus perfectos y 
                ajustados ritmos o la ininterrumpida sucesión de hechos y 
                acontecimientos. que tienen lugar durante el curso de nuestra 
                vida.
 
 Tal como decíamos en páginas anteriores, consubstancialmente con 
                el proceso de la Creación y aún antes de que la actividad dévica 
                de substanciación del éter haga objetiva la Voluntad del Señor 
                del Universo, se halla presente ya la Voluntad de acción de los 
                Señores del Karma. Su Cruz, proyectándose en los insondables 
                vacíos del Espacio, invita al germen de Vida Logoico -dicho con 
                toda reverencia- a que se sitúe en el centro místico de la 
                figura geométrica creada por la interacción de los Grandes 
                Señores. Así, bajo la dirección de los Señores del Karma será 
                iniciado el proceso creador de Universo, en el devenir del cual 
                se sucederán dentro de la Conciencia Logoica una serie infinita 
                de modificaciones que darán lugar al desarrollo evolutivo, desde 
                la difícil y azarosa proyección de Vida que va de la periferia 
                del círculo-no-se-pasa al centro creador logoico, originando la 
                base potencial de la Materia y el principio de gravitación 
                universal, hasta la plena liberación de la Conciencia Logoica, 
                la Cual, en un postrer y maravilloso intento logrará destruir 
                las barreras limitadoras del círculo-no-se-pasa que impedían su 
                Acción cósmica y se proyectará hacia los misterios del Espacio 
                infinito, ayudado por el Angel Kármico de la Liberación... La 
                evolución de los Señores del Karma, consubstancial con la de los 
                Logos creadores, estará sin duda por encima de la de ESTOS en el 
                sentido de que han de forjar los Destinos Universales o Logoicos 
                de acuerdo con la visión absoluta de los Registros Akásicos o 
                Memoria Cósmica, siguiendo el trazado de una Ley de Justicia que 
                penetrará en el destino universal de la Conciencia Logoica, 
                orientándola hacia Su implacable y eternamente seguro Destino de 
                Redención y Perfección.
 
 
                Los Símbolos de los Señores del Karma
 
 La imagen del Señor de la Muerte, denominado también el Angel 
                Exterminador, vista su proyección en los niveles etéricos, 
                aparece como una inmensa Entidad cuyas colosales proporciones 
                abarcan la totalidad del Universo, llenando el espacio de unos 
                vivísimos e indescriptibles fulgores ígneos color escarlata. Su 
                antiguo símbolo procedente de un remotísimo pasado lunar era un 
                Angel que llevaba una calavera humana en la mano izquierda y en 
                la derecha una espada de fuego. Sin embargo, vista esta imagen 
                desde el plano causal se aprecia que el símbolo antes descrito 
                no corresponde a la realidad. Nada más opuesto verdaderamente al 
                significado íntimo de la Muerte que la calavera con la cual 
                suele representársela. El Señor de la Muerte es una Llama 
                perenne de Vida. Su verdadero símbolo es el Dardo de Fuego con 
                el cual destruye todas las formas objetivas o subjetivas de la 
                Naturaleza. Investigaciones posteriores llevadas a cabo bajo la 
                experta dirección de JESAZEL me confirmaron estos extremos. Las 
                energías que utiliza el Señor de la Muerte proceden de los 
                primeros subplanos del Plano monádico cósmico. En nuestros 
                estudios esotéricos las denominamos de primer Rayo, siendo estas 
                energías de tipo superior a las actualizadas por el Logos de 
                nuestro Universo para la vivificación de Su formidable Esquema 
                Solar.
 
 La sombra de Su Cruz -tal como puede leerse en El Libro de los 
                Iniciados- se extiende sobre el Espacio, ocupando cada Señor del 
                Karma el brazo de la Cruz que le corresponde creando así, de 
                manera maravillosa, los Cuatro Puntos Cardinales que fijarán la 
                posición y orientación del futuro Universo en relación con los 
                demás Universos y Sistemas estelares inmersos dentro del Espacio 
                Cósmico. Parte esencial y fundamental de la evolución universal 
                es la orientación y posición exacta que de acuerdo con las 
                sabias previsiones de los Señores del Karma, debe ocupar cada 
                Sistema Solar dentro del maravilloso Plan cósmico de conjunto.
 
 La evolución particular de cada Logos, fatalmente vinculada con 
                este plan cósmico de conjunto, se realizará entonces a partir 
                del centro de la Cruz de los Señores del Karma en donde 
                previamente fue introducido el Atomo Permanente Físico del Logos 
                que místicamente encarnó y constituirá el centro vital del 
                Corazón. La primera noción de Vida universal dentro del Esquema 
                o Destino Logoico preparado por los Señores del Karma, son los 
                movimientos de Sístoles y Diástoles del Corazón Solar, 
                originando el primero la Ley de Gravitación molecular y el 
                segundo la de Expansión Cíclica, estando limitada dicha 
                expansión por la extensión en los espacios infinitos de los 
                Brazos de la Cruz de los Señores del Karma, los cuales señalan y 
                definen perfectamente las fronteras o círculo-no-se-pasa de 
                cualquier Sistema solar y de cualquier planeta dentro de no 
                importa qué tipo de Universo.
 
 Según me pareció intuir más adelante -y esta idea la dejo a la 
                inteligente consideración de Uds. - los Dardos de Fuego que 
                utiliza el Señor de la Muerte de nuestro Esquema Solar provienen 
                de la Constelación de LEO, estando relacionada esta constelación 
                con aquel Centro Logoico Monádico que llamamos esotéricamente EL 
                SOL CENTRAL ESPIRITUAL.
 
 El Señor de la Justicia es representado habitualmente armada su 
                mano derecha con una espada de fuego y sosteniendo en la 
                izquierda una balanza. De este símbolo muy arcaico -ya que 
                proviene de un lejanísimo pasado- han sido extraídos 
                multiplicidad de símbolos menores apropiados para expresar las 
                ideas de Cumplimiento y de Justicia, las cuales son 
                consubstanciales con el ejercicio de la Ley serena y equitativa 
                que debe regir el Cosmos absoluto. Desdichadamente para la 
                humanidad estas simbologías -correctamente establecidas a veces- 
                jamás llegaron a plasmarse en auténticas realidades, por cuyo 
                motivo cuando se habla de Ley y de Justicia aquí en la Tierra 
                sólo se hace una muy pálida e insignificante referencia a la Ley 
                de Equilibrio Universal que simboliza la Balanza y, por tanto, 
                poco o nada tienen que ver con la auténtica justicia con que es 
                utilizada la Espada del Cumplimiento cósmico.
 
 “Si elevaras tu conciencia a un plano auténticamente superior, 
                por encima del plano causal -me decía JESAZEL- percibirías el 
                verdadero significado de la Ley de Justicia en la cual sólo 
                existe Amor y Comprensión y no el odio y la ignorancia con que 
                suelen aplicar los hombres el Sentido de la Ley compensatoria de 
                los Actos. La imagen simbólica de la ley tradicional, Espada y 
                Balanza, quedaría reducida al símbolo perfecto de la Bendición 
                Cósmica mediante la cual el Señor de la Justicia, 
                indescriptiblemente amoroso y sereno, NO premia NI castiga, sino 
                que se limita a ajustar los actos con aquellos patrones 
                arquetípicos que toda alma lleva consigo al nacer y que 
                constituyen la raíz espiritual de sus mejores actos. Si se 
                aparta de estos patrones, marcados por el fuego divino en su 
                interior más profundo, se aparta de la Ley, si los sigue acata 
                la Ley y acepto noblemente su destino. El Angel de la Justicia 
                es el Centro mismo de la conciencia humana y forma 
                misteriosamente parte de su destino cósmico. Así, la ayudará 
                siempre para que sea consciente de la Ley y se apreste 
                constantemente a cumplirla.”
 
 Otra de las grandes y misteriosas razones cósmicas que 
                caracterizan al Señor de la Justicia es la INVOCACION DE LOS 
                GRANDES AVATARES que con Su presencia aceleran la evolución 
                universal y planetaria. Tal como dice KRISHNA a ARJUNA en el 
                BAGHAVAD GITA: “. . ,cuando el desequilibrio del mundo altera el 
                cumplimiento de la Ley y la Justicia es transgredida, YO envío a 
                Mis mensajeros para restablecer la Paz y el Orden.” De esta 
                manera, para restablecer la paz y el orden universal, aparecen 
                cíclicamente en la Tierra invocados por el Señor de la Justicia, 
                los Avatares, ya sea bajo forma de Profetas, Salvadores o 
                Instructores espirituales, siendo esta actividad supremamente 
                cósmica una prueba de Amor y de Compasión absoluta por parte de 
                los Señores del Karma.
 
 Las energías cósmicas que se canalizan a través del Angel 
                kármico de la Justicia con destino a nuestro Universo, proceden 
                aparentemente de la Constelación de LIBRA y se distribuyen por 
                medio del planeta Venus 
            
                [El planeta Júpiter interviene también muy activamente en La 
                expansi6n de estas energías. ]
 
                El Señor de los Archivos, vista su proyección en los niveles 
                etéricos, aparece a la vista del observador clarividente 
                sosteniendo un libro en el cual están registrados todos los 
                hechos y acontecimientos pasados, presentes y futuros de nuestro 
                Universo. Sin embargo -y tal como oportunamente me señaló 
                JESAZEL- este símbolo sólo debe ser aceptado de acuerdo con el 
                significado intelectual de un libro, el cual siempre es un 
                contenedor de recuerdos. Rebasada la medida conceptual de la 
                mente y liberado el cerebro de los efectos tridimensionales del 
                tiempo, la imagen del Señor de los Registros en su función 
                natural de MEMORIA COSMICA, aparece como una impresionante 
                Entidad Angélica envuelta completamente por una indescriptible y 
                brillantísima aura color amarillo oro, abarcando la totalidad 
                del Espacio. Su actividad, tal como Su nombre indica, es 
                registrar y archivar todos los hechos, acontecimientos y 
                circunstancias que suceden dentro y fuera de los límites 
                temporales del espacio, es decir, tanto objetivos como 
                subjetivos dentro del omniabarcante seno creador, constituyendo 
                así -vean, por favor, la importancia trascendente de las 
                memorias acumuladas en el tiempo- el fenómeno de la conciencia, 
                ya sea la de un Logos, de un Angel, de un hombre o de un humilde 
                insecto. La conciencia psicológica, la propia luz de la 
                inteligencia, el sentido del amor y el poder de la voluntad no 
                podrían existir indudablemente si no hubiese en su base un 
                conjunto de memorias perfectamente archivadas, en el Cosmos y en 
                el corazón de todos los seres vivientes, que a cada cual da lo 
                suyo y le presta un significativo carácter de evolución y, por 
                tanto, de jerarquía espiritual.
 Cada cual será, pues, según sea la calidad de sus recuerdos. Se 
                trata de un principio de selección natural que todas las almas 
                sin distinción alguna efectúan en el devenir de sus particulares 
                vivencias y nadie será mejor o peor que lo que sus íntimas 
                memorias que justifiquen, utilizándolas en forma de conciencia 
                para proyectarse incesantemente hacia el futuro a la eterna 
                búsqueda de la propia perfección. El Señor de los Registros 
                archiva así todos los actos realizados en la vida, todos los 
                pensamientos y todas las emociones, construyendo con ellos la 
                base sobre la cual se estructura la civilización, la historia y 
                la cultura de los pueblos y de las humanidades. La conciencia 
                instintiva o de rebaño, común al reino animal, es asimismo el 
                resultado de una acumulación de hechos y experiencias realizadas 
                en el interior del alma grupo de este Reino o dentro del alma 
                grupo de las especies que conjuntamente lo integran. La 
                conciencia colectiva de los reinos vegetal y animal en cada una 
                de sus múltiples especies expresa también la actividad del Señor 
                de los Registros, el Cual regula de esta manera las leyes de la 
                evolución universal y planetaria. Extendamos esta asombrosa 
                actividad de registro y archivo del Señor de la Memoria Cósmica 
                al Espacio absoluto y tendremos en nuestro poder la clave de la 
                analogía, que nos permitirá justificar el conocido axioma 
                hermético Igual es arriba que abajo...
 
 Utilizando creadoramente dicha clave no sería erróneo quizás 
                señalar a la Constelación de Capricornio como centro de contacto 
                del Señor de los Registros en relación con nuestro Universo y al 
                planeta Saturno, definido astrológicamente el Mensajero del 
                tiempo, como el Archivador de los Registros planetarios dentro 
                del Sistema solar.
 
 Al Señor de la Liberación se le simbolizó en todos los tiempos 
                como un glorioso Angel venciendo a un Dragón. El símbolo es 
                perfecto en el sentido de que el Angel representa al Espíritu 
                del hombre y el Dragón la síntesis de todas sus limitaciones 
                nacidas del contacto con la Materia, las cuales deben ser 
                vencidas y sublimadas antes de que el alma acceda a la 
                perfección de cualquier estado de conciencia. La Lanza mediante 
                la cual el Angel vence al Dragón tiene también un significado 
                esotérico muy interesante, como por ejemplo asignarle el símbolo 
                de la columna vertebral, profundamente hundida en las entrañas 
                del Dragón de las que brotan sangre y fuego y que vienen a 
                representar el Fuego de Kundalini, el cual asciende por la 
                columna vertebral del Iniciado a medida que la lanza, símbolo de 
                cumplimiento, va destruyendo todas las limitaciones impuestas al 
                alma por la ley que rige la Materia.
 
 La Liberación es, al propio tiempo, un movimiento constante de 
                renovación. La lucha que sostiene el alma en el sentido de su 
                redención, va orientada siempre a impedir que la conciencia se 
                paralice en el tiempo o se ate sutilmente a cualquiera de los 
                hechos de la historia de su vida. La serpiente, que cambia de 
                piel cíclica o periódicamente, es un perfecto símbolo del 
                principio de renovación que lleva adelante el Angel de la 
                Liberación en su esplendorosa e indescriptible ejecutoria. Y 
                véase también en la imagen de la serpiente una indicación del 
                Fuego ascendente de kundalini una vez la Materia ha sido vencida 
                y el alma liberada.
 
 De todas las consecuencias expuestas en este capítulo no sería 
                aventurado decir que el Centro de proyección de las energías del 
                Señor de la Liberación con respecto a nuestro Universo es la 
                Constelación de SAGITARIO, cuyo símbolo es el jinete sagrado 
                arrojando la flecha de las grandes decisiones al mundo del 
                Espíritu, siendo Júpiter, el Hijo predilecto del Logos -según 
                rezan antiguos Comentarios esotéricos- el planeta que regula el 
                movimiento de la Liberación dentro de nuestro Sistema solar, 
                secundado por Urano, a quien en lenguaje oculto se Le denomina 
                El Señor del Cumplimiento.
 
 
 
            
                      
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